viernes, 27 de febrero de 2015

10 tips para tener un equipo de trabajo saludable

Toma nota de estos consejos para que tus empleados recuperen la energía perdida y sean más productivos en la empresa.

No hay duda que los lugares de trabajo saludable y feliz tienen a los equipos más productivos. Cuando apenas estás lanzando una empresa, invertir en programas de ejercicios o en un gimnasio completo puede ser muy costoso. Por suerte, los hábitos saludables no tienen que costar tanto. Hay muchas formas para preservar la salud de tu equipo y hacer que tu negocio funcione perfectamente.

Aquí está la fórmula para mantener a tu equipo saludable sin la necesidad de una gran inversión:

1. Compra comida saludable. Ve a una tienda dos veces por mes y compra productos saludables como fruta fresca, nueces y barras de granola para la cocina.

2. Organiza eventos saludables. Una o dos veces al mes, pídele a la gente que prepare una dieta nutritiva en su casa para que se la coman como grupo.

3. Trae a un instructor de yoga para tener una clase después del trabajo. Un estudio de 2009 dice que aproximadamente 40 adultos se dieron cuenta que 20 minutos al día de meditación guiada y yoga les bajaba el nivel de estrés más de un 10 por ciento y mejoraba sus hábitos de sueño.

4. Sal de la sala de conferencias y discute ideas importantes mientras caminas. Un estudio de 2011 afirma que 400 mil personas en Taiwán descubrieron que con 15 minutos de ejercicio moderado tendrían grandes beneficios de salud y que su expectativa de vida aumentaría tres años.

5. Invierte en un escritorio en el que deban estar de pie. Es importante que los empleados no estén sentados todo el día. Un estudio sugiere que si las personas se levantan de vez en cuando, puede disminuir la fatiga y el malestar en los que tienen sobrepeso.

6. Promueve el cuidado preventivo. Una forma de hacer esto es impulsando a todos a vacunarse o buscar a alguien que vaya a tus oficinas y ofrezca este servicio.

7. Promueve el ejercicio en grupo. Puede ser una vez a la semana o en fines de semana y las actividades pueden incluir correr, hacer yoga o un boot-camp.

8. Pregunta sobre paquetes en gimnasios locales. Las cadenas más grandes ofrecen programas de salud y paquetes corporativos.

9. Enfatiza en la educación invitando a un nutriólogo, coach de salud o hasta a una maestra de aerobics o de cocina. Deja que los empleados se inscriban con estas personas para que los guíen y adopten buenos hábitos en su vida.


10. Diles que tomen descansos durante el día. Un estudio de 2010 dice que hasta un pequeño break mental puede mejorar mucho la habilidad de una persona para concentrarse en diversas tareas durante más tiempo.

miércoles, 25 de febrero de 2015

10 consejos para ser un mejor líder

Sigue esta guía para dirigir tu negocio hacia el éxito, motivando a tus colaboradores todos los días.

Seamos honestos: ser un líder no es fácil. Las buenas noticias son que hemos compilado una lista de grandes consejos que te ayudarán a manejar tu negocio como un gran jefe.

1. Guía con el ejemplo. Los líderes necesitan actuar no sólo hablar. Si quieres que tus empleados sean puntuales, asegúrate de llegar a tiempo o por lo menos temprano. Si el profesionalismo es una prioridad, vístete para el éxito y trata a todos con cortesía.

2. Un poco de humildad te llevará lejos. Hay una gran diferencia entre ser un líder y un jefe. Aunque ambos están a cargo, pero un líder comparte el centro de atención y se siente cómodo dándoles también el crédito a los otros. Aunque parezca contraproducente, ser humilde te dará más confianza. Tus empleados lo apreciarán y tu clientes también.

3. Comunícate efectivamente. Esto es imperativo, tanto en la oficina como en tu vida personal. Los grandes líderes se aseguran de ser escuchados y entendidos, pero también saben que es importante escuchar. La comunicación es una calle de dos vías y saber aprovecharla hará que tu empresa siga creciendo en lugar de frenarse.

4. Haz que tus juntas sean productivas. Como dice el dicho, el tiempo es dinero. Así que debes aprender a ahorrar tiempo, sobre todo en las juntas. Si confías que tu equipo hará el trabajo, no debería haber la necesidad de recurrir a la microgestión.

5. Conoce tus límites. Hasta el líder más amable y atento tiene sus límites. Establécelos y atente a ellos. Si los demás saben lo que no vas a tolerar va a haber menos frustración, eso evitará confusiones.

6. Encuentra un mentor. Los mejores líderes saben cuándo necesitan ayuda y saben hacia dónde ir para obtenerla. Nadie sabe todo, así que encuentra a alguien en quien confíes para que te aconseje cuando las cosas se pongan difíciles.

7. Sé emocionalmente consciente. Aunque mucha gente aconseja que separes las emociones de los negocios, las negociaciones son relaciones con personas. Para hacer que éstas duren, necesitas ser emocionalmente inteligente para ser sensible a los diferentes puntos de vista.

8. Cuídate de (y evita) errores comunes de liderazgo. Todos se equivocan, pero algunos errores pueden evitarse. Para no repetirlos, debes estar consciente de ellos sin obsesionarte.

9. Aprende del pasado. La historia, reciente o pasada, está llena de modelos de negocios exitosos y de grandes fracasos. Piensa en la gente que admiras y descubre qué salió mal para aquellos que terminaron sus carreras con algún escándalo.


10. Nunca dejes de mejorar. Los grandes líderes están constantemente aprendiendo. Siempre habrá algo en lo que puedas trabajar o una nueva habilidad que dominar. Asegúrate de tener tu mente abierta a nuevas ideas y posibilidades.

lunes, 23 de febrero de 2015

4 etapas para establecer un canal de ventas

El éxito de tu negocio no sólo depende de tu producto o servicio, también es importante que mejores tus habilidades para vender y retener clientes.

Un solo objetivo. Un solo responsable.

El primer punto es definir a una persona responsable de esta tarea. Además debe ser, en mi opinión personal, uno de los fundadores. Pero, ¿por qué debe ser uno de los socios y no cualquier otro individuo (incluso un especialista en ventas)? Por tres razones fundamentales:

No todo son las ventas, lo más importante es aprender de nuestros potenciales clientes cuando estamos reunidos con ellos para cerrar un acuerdo. Las dudas y hasta las sugerencias que puedan surgir van a ser fundamentales para perfeccionar nuestro producto.

Por más que el responsable/fundador asignado desconozca absolutamente “cómo vender“, esto no va a ser un problema mientras tenga la pasión y el conocimiento sobre el proyecto (y la industria).

Al momento de buscar capital, los inversionistas van a tomar como dato más importante la facturación alcanzada junto con el crecimiento mensual. Si podemos demostrar un crecimiento sostenido, las posibilidades de levantar capital se incrementarán exponencialmente.

Estructura del canal de ventas

El segundo factor, una vez que el responsable fue designado, es diseñar el proceso estandarizado de ventas que va a implementar nuestro emprendimiento. Para que éste tenga lógica, escalabilidad y simplicidad, como lo hicimos con nuestro propio emprendimiento, lo vamos a dividir en cuatro etapas:

Exploración. Consiste en identificar a cada uno de los potenciales clientes que puedan tener la necesidad de usar nuestro producto. Pero no es sólo eso, sino que además sean lo suficientemente innovadores como para animarse a probarlo. Según indican varios estudios, como el presentado por Rogers Bell Curve, nuestro público objetivo en un principio no es ni más ni menos que el 2.5 por ciento del mercado actual.

En consecuencia, estamos hablando de que la clave en esta etapa radica en la “perseverancia“. De cada 50 clientes potenciales que contactemos, sólo uno estará dispuesto a probar un nuevo y desconocido emprendimiento como el nuestro.

La mejor alternativa, en nuestro caso, fue utilizar la red social LinkedIn, y con ayuda de un mensaje lo más breve y simple posible, pudimos establecer una red de contactos profesional (mientras más corto y menos detallado esté el mensaje, será mejor la conversión).

Conversiones. Esta segunda etapa se basa en conocer al cliente y que éste también conozca nuestro nuevo servicio ya sea por teléfono o de forma presencial. Los que deben hablar más son nuestros clientes, NO nosotros. Debemos aprender a escuchar.

Por más que estemos súper entusiasmados (orgullosos) por todo lo que hemos logrado/desarrollado hasta el momento y tengamos mil novedades que contarles, debemos aprender de los mejores vendedores: “las ventas se concretan cuando el cliente realiza la mayor parte de la conversación“.

Para lograr este objetivo, debemos tener escritas las mejores preguntas para poder conocer perfectamente a nuestros potenciales clientes (y sus problemas, los cuales queremos solucionar). Por ejemplo:

Los problemas que nosotros queremos solucionar para ti con esta nueva herramienta, ¿cómo los solucionas tú hoy en día?

Sí tuvieras todos los recursos disponibles, ¿cuál sería tu solución ideal?

¿Por qué me brindaste esta excelente oportunidad de tener una reunión hoy contigo?

¿Cuál piensas que sería el aspecto principal por el cual esta nueva idea puede fracasar?

¿Existe algún impedimento que no te permita utilizar nuestro producto en el futuro?

Seguimiento. Quizás todos soñamos con el sí inmediato, (porque estamos seguros de que nuestra idea es fantástica), pero la realidad es que el secreto está en el seguimiento. A nivel técnico, la herramienta que usamos para esto es Boomerang para Gmail, la cual nos permite recordar exactamente cuándo debemos retomar una conversación con un cliente.

Generalmente, en la mayoría de los emprendimientos en los que he participado como inversionista, pasan entre 10 a 12 contactos promedio hasta cerrar la venta (desde emails, llamadas, reuniones, contratos, entre otros).

Pero debemos ser conscientes de que el recurso más importante que tenemos como emprendedores es el tiempo. En consecuencia, de nada sirve estar perdiendo horas, días y semanas con potenciales clientes que siempre e indefinidamente están en "quizás". Mientras más pronto lleguemos a un sí o incluso a un no, mejor (siempre en buenos términos). No tengamos miedo de buscar un momento apropiado para preguntar “¿Les gustaría trabajar con nosotros?“.

En caso negativo, conoce sus razones y continúa con la búsqueda de un nuevo cliente que tenga más posibilidades de un sí, como vimos en el punto uno, al final es un juego de números (perseverancia).

Cierre de ventas. Aquí me gustaría ir directamente a la práctica con tres consejos puntuales:

No entrar en detalles menores. Al momento de cerrar el contrato y firmarlo para comenzar a trabajar, dejemos de lado los detalles y cambios menores que pueda solicitar el cliente, accedamos a ellos rápidamente. Lo más importante en esta etapa, es aprender de nuestros clientes y no discutir sobre cada una de las cláusulas, como por ejemplo “para dar por finalizado el contrato se debe informar con tres meses de anticipación”, si el cliente quiere con un mes, o ninguno de anticipación, no hay problema, sigamos adelante y cerremos el trato.

“Queremos firmar, pero falta una funcionalidad extra”. Es común escuchar esto de distintos potenciales usuarios, lo mejor es no entrar en esta discusión porque generalmente por más que la implementemos, siempre van a tener una excusa para no comprar. No podemos hacer un producto a la medida de cada cliente (imposible de escalar a largo plazo). Si escuchamos esta solicitud de funcionalidad una y otra vez (hasta el cansancio), ahí es cuando la podemos implementar, no antes. Para esto recomiendo leer y aprender del blog del profesor de Stanford University Steve Blank.

“¿Me pueden ofrecer un periodo de prueba?”. Muchos usuarios en internet están acostumbrados a esto y no los culpo, pero recomiendo no hacerlo. Como emprendimiento necesitamos: compromiso, validación e ingresos. Nada de esto nos va a brindar un periodo de prueba. Lo que podemos hacer, es ofrecer un contrato anual con la posibilidad de cancelar sin ningún costo en los primeros 30 o 60 días.


Cualquier fundador de un nuevo emprendimiento puede y debe ser el mejor vendedor del mundo en el producto que soñó y está desarrollando. Para mí, un vendedor se hace, no nace. Las claves: dedicación y perseverancia.

viernes, 6 de febrero de 2015

Cómo mantener motivado al personal

Por ActionCOACH José Eduardo Villacís Mora

Antiguamente los negocios se centraban en el producto. Hoy la clave de un negocio exitoso es estar centrado en el cliente para descubrir y satisfacer con rapidez sus necesidades, que mejor manera de hacerlo que por medio de tus empleados, pero para eso debes de mantenerlos motivados. Tarea que sólo se puede realizar con excelencia si tu personal está suficientemente motivado y enfocado en el servicio al cliente. Por lo tanto, si dedicas una buena parte de tus recursos y esfuerzos para motivar a tus colaboradores, pronto veras grandes resultados.

Capacitación y Entrenamiento. Una de las razones por las que un empleado puede ofrecer un servicio inadecuado es por falta de conocimiento acerca del producto o servicios que la empresa brinda. Atender al cliente con respuestas cortas, negativas o tajantes puede ser identificado como una señal de "ignorancia técnica" que tu personal de atención o vendedores pueden estarte enviando. Invertir en capacitarlos adecuadamente y proveerles del material adecuado para su desempeño (precios, catálogos, entrenamiento, etc.) es un primer paso en reforzar su seguridad personal y profesional frente al cliente. Identidad con la compañía. Los japoneses han hecho uso de este concepto por siglos y consiste en hacer que tus colaboradores (no "empleados") se sientan parte y se identifican con la visión de la empresa. Darles a conocer la historia de la empresa, los logros y los objetivos a mediano y largo plazo ayudará a reducir la apatía y crear en ellos un compromiso mayor. Incentivos.

Toda persona necesita de incentivos para mejorar su productividad. La regla es "quien trabaja mejor" debe ser recompensado por sobre quienes simplemente "trabajan normal" de tal manera que se cree una energía sana y positiva en los equipos y colaboradores que demuestran un mayor compromiso, desempeño y calidad en la atención del cliente.

Bonos económicos, viajes o algún premio trimestral pueden hacer la diferencia en la forma como tu personal hace su trabajo. Reconocimiento. Las grandes compañías multinivel manejan muy bien este concepto ya que comprenden que una de las necesidades primordiales del ser humano es "ser reconocido" por sus logros. Crear ceremonias semestrales y anuales en las cuales se reconozca con un diploma y algún obsequio el compromiso de los mejores colaboradores es una forma de mantener viva la energía positiva que potencia la calidad en el servicio.

Sin importar el nivel o el área de trabajo en la que se desempeñan, desde un conserje hasta un gerente, todos necesitan en algún momento recibir reconocimiento. La foto con el empleado del mes o el "mejor vendedor" son excelentes para este fin. Finalmente, recuerda que si incrementas la calidad de vida de tu personal, automáticamente estarás incrementando tu efectividad en los negocios.

Claves para Retener al Personal

La crisis por un lado, y la escasez de mano de obra, por el otro, nos está haciendo daño a todos. Es por eso que en el siguiente artículo decidimos mencionarles algunas claves que los ayudaran a retener al personal de su empresa...

1. Empiece con aprecio honrado y sincero. Quizás simplemente están haciendo la tarea por la cual usted les paga, pero de todos modos pueden ser apreciados por su trabajo duro, su compromiso, su atención a la calidad. Recuérdeles constantemente que usted aprecia lo que están haciendo por usted y por la empresa.

2. Hágalos sentir importantes todos los días, sinceramente. Los empleados de hoy saben cuán valiosos son su trabajo y sus habilidades, pero muy a menudo, una vez que contratamos a alguien, nos olvidamos de recordarle cuán valioso es para la empresa. Camine por la oficina o la planta y dígales de qué manera su desempeño contribuye a que sus clientes estén satisfechos.

3. Sea comprensivo con sus ideas y deseos. Cada individuo tiene metas y sueños únicos. Averigüe sobre esos deseos y haga lo que pueda para ayudar al empleado a lograrlos. Un empleado joven puede estar ahorrando para comprarse una casa; ofrézcale una hora con su asesor personal de inversiones como un servicio de regalo por el aniversario. Otros empleados pueden querer más tiempo con sus hijos; aliente a los supervisores para que trabajen con horarios de trabajo flexibles, incluyendo más puestos de medio tiempo.

 4. Hable siempre de lo que les interesa. ¿Cómo discute el futuro de la empresa? Muchos presidentes de compañías llaman a reuniones para hablar sobre el crecimiento y las ganancias, asumiendo que los empleados valoran estas cosas. Muchos empleados, sin embargo, se van de estas reuniones con la sensación de que si trabajan más duro, otras personas ven los beneficios, no ellos. En vez de esto, hable sobre el futuro de la empresa en los términos de los empleados. Mayores ingresos pueden generar más oportunidades de capacitación u otros beneficios deseables. La expansión significa que más personas van a ser ascendidas.

No se puede garantizar que esto solucione su problema completamente, especialmente a corto plazo– las personas jóvenes en particular no han tenido la suficiente experiencia de vida como para darse cuenta que es más importante el respeto que unos pesos extra en el bolsillo. Sin embargo, sí se puede decir que las empresas con los mejores records en retención de empleados siguen estas estrategias diligentemente.


¿Qué acciones tomarás en tu negocio y en tu vida, en este sentido?